domingo, 28 de marzo de 2010

Jhon vs. Tomas

-Tomas. Sí Tomas. Un chico de mi estatura, cabello corto, ojos color miel... ¿cómo que nunca lo viste?
-No, Sophie te juro que nunca lo vi- dijo Sinthia por quinta vez- Pero, ¿por qué tanta pregunta?
-Ya te conté, me lo cruzé, porque su perro me siguió y bueno se lo devolvi y...
-¿Solo por eso?
-Si... bueno...
-Sophie... te conozco. Ese chico te gusta.
-No, nada que ver... va tal vez un poco pero...-yo no sabía mentir. Y menos a Sinthia que me conocía más que nadie.
-¡Que alegría! si este chico te gusta tal vez puedas olvidarte de Jh...
-Eh.. si bueno nos vemos.
-¡Sophie lo siento mucho!
-No te preocupes Sinthy quizas, hasta tengas razon.
Corté el telefono y me quede pensando en esta posibilidad.
Sonaba extraño, pero quien sabe lo que podría ocurrir.
Igualmente, en este momento, si tenia un Jhon vs. Tomas elegía a Jhon sin dudarlo.
-¡Sophie! ¿Que quieres comer hoy?-mi madre me formulaba esta pregunta desde el piso de abajo.
Mi respuesta era siempre la misma:
-¡Carne!
-¿Otra vez?
-Si. Definitivamente no soy vegetariana Mamá.
-Ya lo sé, pero las verduras hacen bien. Yo diría que eres completamente Carnívora.
Yo sabía por qué. Esta semana me estaba comportando distinta. El viernes habrá luna llena. Lo tenía todo calculado, lo había grabado en mi mente como un sello. No debía olvidarme.
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Luego de comer, mi carne casi cruda para desagrado de mi madre, salí rumbo al colegio. Iba caminando tranquilamente. Eran las 12:00 del medio día, pero el sol no estaba tan fuerte.
¡Guau! ¡Guau!
Yo conocía esos laridos. Era Spike.
Me llené de alegría. No solo por ver nuevamente a este perrito tan simpático, sino que solo al pensar que en pocos segundos aparecería Tomas... me dibujaba una sonrisa en el rostro.
Tomé a el cachorro en brazos.
-Otra vez tu pequeño... ¿te perdiste?
Cualquiera diría que estoy loca por hablarle a los animales. Pero ya es una costumbre mía. Tengo fe de que en el fondo saben lo que digo y más todavía si yo misma soy mitad animal.
Alguien me tocó el hombro.
-Linda, ¿me devuelves mi mascota?- dijo Tomas con un tono entre caballero y seductor que me encantó.
-Ehh... si, como no- balbucee esas palabras como pude. Es ¿entendí mal, o me llamó linda? Sé que no es bueno ilusionarse, que algunas personas le dicen linda a otras cariñosamente, pero a mí me dejó atontada. Le pasé a Spike.
-Como es el destino. Volvimos a encontrarnos...
-Es verdad, que.. coincidencia.-dije entre risas tontas. Que patetica.
-Bueno me tengo que ir...-dijo Tomas, intentando ocultar su pena.
-Si... yo iba camino al colegio.
-¿Quieres que te acompañe?
-¡Me encantaría! digo... -me aclaré la garganta- solo si tu quieres...
-Jaja, entonces vamos. -me tomó de la mano y comenzamos a caminar.
Fue un camino entretenido. Me contó que vivia a una calle de mi casa pero que concurría a otro instituto. A de más, él tiene 15 años, dos años más que yo. Eso me agradaba.
Llegamos a la puerta del colegio. Pude ver con el borde del ojo a Jhon observandonos atentamente.
-Espera Tomas- me acerqué a el y le escribí mi numero en su mano.- ¿Me llamarás?
-Claro que si.

OVA JHON

Yo estaba parado en la entrada del colegio esperando a que sonara el timbre y... ¿qué es lo que veo? ¿esa es Sophie? ¿Y ese chico?
Comenzé a enfurecerme. Estaba celoso. Cómo se atreve a cambiarme asi, por ese chico... dios ya estoy sonando como un chico caprichoso. A de mas me lo merezco, fui yo el que la dejé. Fui yo el que como un completo idiota dejé pasar al amor de mi vida, a esta chica que me iluminaba los días.
Sentí que mi corazón se partía al verla con otro. Pero debía ser fuerte. Si ella quería jugar, yo estaba dispuesto a competir.


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